El XXII Congreso Iberolatinoamericano del Asfalto, celebrado en Granada, España, se inició con una energía palpable y un sentido de comunidad que trascendió las expectativas. Más de mil asistentes se congregaron para este evento emblemático en el mundo de las carreteras, convirtiendo cada momento en una experiencia inolvidable.
Desde el primer día, quedó claro que el CILA no es solo un evento técnico, sino una familia unida por la pasión por las carreteras y el asfalto. El acto inaugural fue impresionante, con la música y el baile del flamenco que cautivaron los corazones de todos los presentes. Las exposiciones técnicas fueron excelentes, acompañadas de un almuerzo donde los lazos entre colegas se fortalecieron.
El ambiente en los salones fue impecable, reflejando la elegancia y la energía que caracterizan al CILA. Tuve el honor de asistir a la reunión exclusiva con DIRCAIBEA, donde se discutieron temas importantes para el futuro de nuestras carreteras. Las exposiciones continuaron durante la tarde, culminando con un programa cultural de alto nivel, dirigido por el distinguido catedrático y escritor José Luis Corral.
El día finalizó con un emotivo cóctel, donde los participantes intercambiaron ideas y experiencias, consolidando aún más los lazos profesionales y personales. Como representante paraguaya, me siento profundamente agradecida por el reconocimiento y el respeto que he recibido de colegas de diversos países.
Mirando hacia el futuro, estamos ansiosos por organizar el mejor y más grande Congreso CILA en noviembre de 2025, con la determinación de superar las expectativas y fortalecer aún más la comunidad global de profesionales del asfalto. ¡Este evento será recordado como una experiencia única e inolvidable para todos los que tuvimos el privilegio de participar!
