La tecnología se utiliza para crear modelos tridimensionales que permitan separar los ambientes de la casa, y entre todas las ideas se elige la que mejor se acople a la topografía.
El fundador de Studio Saxe, Benjamín Saxe, participó en la edición 2021 de Expo Construir presentando su propuesta acerca del uso de la tecnología para lograr mejores obras desde el ámbito de la arquitectura, contribuyendo así a mejorar la calidad de vida.
La organización que lidera Saxe ejecuta soluciones arquitectónicas en armonía con la naturaleza, cuyo proceso inicia desde la etapa de pre construcción. En este caso, el uso de la tecnología está orientado entender mejor el sol, la lluvia, los vientos, la humedad o la temperatura de un lugar, a fin de generar confort climático desde antes del inicio de las obras. “Vemos que la tecnología es una manera de hacer un diseño inteligente, en vez de arreglar un problema de diseño. La idea es generar propuestas eficientes que no requieran tanto consumo energético”, comentó.
Saxe Studio utiliza satélites e información en línea para determinar, por ejemplo, de dónde vienen los vientos predominantes en alguna localización, así como los picos de temperaturas, las precipitaciones en cada temporada del año, entre otros datos.
“Tenemos consultores locales e internacionales que utilizan programas de análisis exhaustivos para entender el confort climático. Probamos nuestros diseños y vamos evolucionando desde antes que la edificación exista”, señala Saxe.
Parte de la propuesta consiste en escuchar los requisitos del cliente, con especial enfoque en usos, áreas, presupuesto y estilo de vida. La tecnología se utiliza para crear modelos tridimensionales que permitan separar los ambientes de la casa, y entre todas las ideas se elige la que mejor se acople a la topografía.
“Nuestras tecnologías para la pre construcción están dirigidas a adaptarnos al clima, a la geología, a la geografía, a los vientos, y cómo generar formas que sean adecuadas para todas esas condiciones. Después nos empatamos con los sueños del cliente, pues ellos tienen su propio programa. El objetivo es lograr un balance perfecto entre la intención humana y las condiciones del sitio”, detalló.
El siguiente paso es la construcción en sí. La clave aquí es definir un método que realmente funcione. Para ello, utilizan el concreto convencional, pero también se consideran insumos como metal, madera local, bambú, métodos alternativos como la tierra comprimida y sistemas prefabricados.
En términos de materiales, Saxe indicó que la prioridad es entender qué hay a nivel local y qué se importa. La ubicación de la construcción es la principal guía. “Por ejemplo, si tenemos un lugar muy remoto, es muy difícil llevar grandes cantidades de concreto, entonces utilizamos más piezas de metal que podemos ensamblar en sitio. Dependiendo de la accesibilidad podemos optar por diferentes materiales”, explicó.
El fundador de Studio Saxe también se refirió a una de las mejores técnicas bioclimáticas para el desarrollo de proyectos arquitectónicos, que consiste en la “desmaterialización de la masa”, indispensable para lograr diferentes “caras” en cada espacio y ventilaciones cruzadas.
“Nuestros proyectos no son como una caja completa, sino que se descomponen en varias piezas para poder tener diferentes accesos a ventilaciones y luces. Esta estrategia nos ha permitido hacer que los espacios sean más cómodos para el cliente”, dijo Saxe.
Fuente: web de revista construir.com
