Nolberto Céspedes es, tal vez, uno de los primeros pobladores del barrio. Vive en una esquina de la calle Choferes del Chaco, desde hace 42 años. Por eso, conoce como nadie lo que ha significado vivir en un “mar de cloacas”, como describe la situación en la que transcurrían sus días, y los de sus vecinos, hasta hace más de un año.
“Desde que la obra empezó, el barrio mejoró muchísimo. Antes, no podíamos transitar por esta calle. Ahora, logramos descansar de las aguas cloacales”, dice aliviado.
Sobre el trabajo del MOPC, evalúa con satisfacción que el equipo técnico y social “coordinó mucho el trabajo con los vecinos”. Y se une a las expresiones de satisfacción de todo el barrio, ante tan sustancial cambio: “Estamos muy contentos con el trabajo que hicieron”.
Fuente: web del MOPC