Además de las capacidades de enfriamiento, los aires acondicionados de hoy también vienen con funciones de purificación y deshumidificación de aire.
Saber que su aire acondicionado funciona las 24 horas del día puede generar preocupaciones sobre las facturas de electricidad elevadas y la huella ambiental que pueda dejar su hogar. Al comprender que esto es una preocupación real para muchos consumidores, Samsung Electronics trabaja para hacer que sus electrodomésticos sean más eficientes energéticamente. Por ejemplo: el aire acondicionado Wind-Free™ de Samsung cuenta con la tecnología Digital Inverter Boost, una innovación de ahorro de energía que reduce el consumo de energía del dispositivo hasta en un 73% en comparación con los aires acondicionados tradicionales de velocidad fija.
Además, el modo Wind-Free™ del aire acondicionado Wind-Free™ puede incluso reducir el consumo de energía en un 77% en comparación con el Modo de Enfriamiento Rápido (Fast Cooling Mode) de la unidad, incluso cuando está a su máxima potencia. Dos ingenieros de Samsung nos explican sus revolucionarias tecnologías de ahorro de energía.
Así como el agua de una cascada, que cae desde un terreno más alto a un terreno más bajo, la energía se mueve de arriba hacia abajo. Los aires acondicionados que utilizan la tecnología de compresores para reducir las temperaturas tienen que reducir el calor a través de un proceso que va en contra de este flujo natural de energía, razón por la cual los aires acondicionados convencionalmente requieren mucha energía para funcionar. “El compresor sirve como una bomba que hace circular el calor, moviendo la materia de un punto más bajo a un punto más alto”, explicó el Ingeniero Principal, Byoung-Ok Ahn. “Esto significa que el dispositivo tiene que consumir mucha electricidad”.
Para ayudar a los usuarios a ahorrar energía, Samsung adoptó un compresor inversor – tecnología Digital Inverter Boost – que puede regular sus propias revoluciones por minuto (RPM) para mantener su uso de energía con la máxima eficiencia.
Un compresor de velocidad fija funcionará a la velocidad máxima hasta que se alcance la temperatura deseada y luego se apagará una vez que se la logre. Si la temperatura excede esta tasa deseada después de la primera ronda de enfriamiento, se encenderá nuevamente a la salida máxima para bajar la temperatura. Este proceso repetido de encendido y apagado consume mucha energía y también crea una fluctuación en la temperatura ambiente cuando el enfriamiento se enciende y apaga nuevamente.
Fuente:web de revistaconstruir.com escrito por Maria Melba Calero